Lo que se puede publicar en un blog… y lo que no
Cuando decides crear una página de internet –ya sea personal o de negocios–, puedes utilizar un blog como un espacio para destilar las ideas, los objetivos y los beneficios de tu propuesta digital, de modo que puedas apelar a una amplia audiencia de lectores o clientes potenciales de forma directa y efectiva.
Además, puedes sacarle mucho provecho a un blog empresarial ya que a través de él podrás informar a tus clientes sobre los productos o servicios que ofreces con mayor detalle. Y por si fuera poco, cuando tienes el respaldo de una plataforma como WordPress, agregar esta sección a tu web es muy fácil.
Sin embargo, lo complicado del blogging puede ser crear una propuesta valiosa y consistente que te ayude a aumentar tu visibilidad, atraer más tráfico a tu sitio y elevar tu credibilidad y autoridad en tu área profesional o sector.
Por eso, en esta ocasión te queremos compartir algunos consejos prácticos para que sepas lo que debes publicar en un blog, y sobre todo, lo que tienes que evitar a toda costa.
ABC del blog posting
Antes de pasar a los do’s and don’ts, veamos los principios básicos detrás de un blogging consistente y sólido.
A. Publica con frecuencia
Seguramente has escuchado esto ya muchas veces, pero sigue siendo igual de válido: mientras más entradas publiques regularmente, mayores posibilidades tendrás de posicionarte en la red. De dos a tres entradas a la semana es un estándar aceptable.
Si de pronto te quedas sin inspiración, puedes tomar una publicación anterior y darle un giro, actualizarla o simplemente re-editarla con nuevas etiquetas. Así no dejarás varios días sin publicar.
B. Cuida tu estilo y ortografía
No todo es cantidad: el valor agregado viene en el contenido, que es la esencia de tu página web. Así, antes de darle clic al botón “publicar”, revisa que las frases sean coherentes y que los acentos, puntos y comas estén en su lugar.
Adicionalmente, y antes de comenzar a crear tus entradas, es importante que sepas qué estilo utilizarás (formal, personal o informal) y si sólo hablarás de asuntos institucionales o si también tocarás temas personales o de tipo inspiracional.
C. Crea un plan de publicaciones
Ya que definiste un estilo y la frecuencia de publicación, lo siguiente es tener metas claras que quieras alcanzar con tus posts. Por eso, crear un plan de contenidos para saber lo que publicarás cada semana es una guía necesaria.
Con esto no queremos decir que seas inflexible y sólo publiques los temas que tengas calendarizados, pues también puedes incorporar las sugerencias de tu público para crear artículos frescos que generen engagement.
Qué SÍ publicar en un blog
SÍ: escribe sobre temas de tu área de experiencia ✅

Si esperas convertirte en la voz de autoridad y una fuente confiable de información, los artículos que escribas y publiques deben demostrarlo. Por eso, identifica los temas en los que tu conocimiento esté en modo: experto.
¿Qué te llevó a elegir tu profesión? ¿Quiénes te inspiraron? ¿Qué aprendizajes has tenido? Si quieres que tus lectores confíen en ti, debes hacer que te conozcan.
Adicionalmente, debes seguir expandiendo tus conocimientos en tu campo de especialidad. Estar al día y mantener a tu audiencia actualizada con las últimas novedades es la mejor forma de no quedarte sin temas de qué hablar.
SÍ: redacta artículos con un ángulo específico ✅

Para que evites irte por las ramas, cada entrada que escribas debe tratar de un tema en específico. Mientras más acotado, mejor.
Si el tema es muy amplio, divídelo por subtemas y crea una serie de posts. Con esto además puedes cubrir varias semanas de contenidos.
Eso sí, cuida siempre que el ángulo que elijas sea original y creativo para que tu audiencia reciba información de valor y no un refrito.
SÍ: habla de tu empresa y dale voz a tus colaboradores ✅

El mejor marketing lo hacen las personas convencidas de la propuesta de valor de una empresa. Por eso, crea artículos en los que hables sobre cómo tus productos o servicios resuelven alguna necesidad particular de las personas.
Los logros de tu empresa, los testimoniales de clientes felices o las entrevistas a tu personal sobre lo que más les gusta de su trabajo, son temas que pueden dejar una huella positiva tanto en una audiencia fiel como de prospectos.
Otro enfoque es hacer que vendedores experimentados o personal que conozca el corazón de tu propuesta sean quienes orienten a futuros compradores sobre lo que pueden esperar al adquirir lo que vendes.
Qué NO publicar en un blog
NO plagies ❌

Aunque parezca obvio, decir que el plagio perjudica a tu propuesta de valor es algo que debemos recalcar ya que tiene consecuencias más profundas, por ejemplo, en tu posicionamiento en buscadores.
Y es que, el algoritmo de Google puede identificar cuando copias contenido de otros sitios y disminuir tu rating de búsquedas.
Pero no solo eso, también te arriesgas a enfrentar una denuncia por plagio que podría resultar en la baja de tu sitio web o consecuencias legales personales o para tu compañía, con el desprestigio que esto acarrea.
Por eso, evita el copy-paste y agrega los links a las fuentes que utilices, parafraseando o usando comillas (“_”) cuando hagas una cita textual.
Asimismo, evita ser multado por usar gráficos o fotos con derechos de autor. Mejor utiliza material propio o acude a bancos imágenes gratuitas como Pixabay o Unsplash y otorga el crédito correspondiente.
NO hables mal de la competencia ❌

Hablar mal de la competencia o hacer malas reseñas de los productos y servicios de otras empresas solamente te hará quedar mal ante la comunidad virtual, además te hará lucir como una empresa poco profesional y con poca credibilidad.
Un giro sería escribir sobre por qué tu producto o servicio no sirve a ciertos sectores del público: además de ser un enfoque honesto y valiente, te ayudará a filtrar a los prospectos que no son aptos para tu propuesta.
NO hagas textos “infinitos” ❌

Con la cantidad de contenidos y opciones de entretenimiento e información en internet, sólo tienes unos cuantos segundos para retener la atención de tu audiencia. Por eso, ¡no les des tiempo de dudar si quieren leerte al poner filas de texto interminable!
En cambio, utiliza descansos visuales, títulos llamativos e imágenes evocativas para mantener su interés. Y divide los párrafos en perlas digeribles.
Como ves, llevar un blog empresarial o incluso uno personal es una gran responsabilidad, no solamente por la frecuencia con la que deberás actualizarlo sino por el estilo y la planeación que requiere.
Por eso, una vez que comiences a crear una página de internet enfocada en atraer y fidelizar a una audiencia, apóyate en la asesoría de expertos que resuelvan tus dudas y te brinden las herramientas para hacer que tu sitio se destaque entre la vasta oferta de contenidos online.
Lo importante es que te sientas bien por lo que aportan tus entradas ya que, mientras más disfrutes de escribir por y para tu propuesta digital, eso se verá reflejado en visitas, comentarios y respuestas de tu público. ¡Súmate a la conversación!
Aprende más: ¿Qué publicar en tu blog WordPress si acabas de llegar al mundo digital?